Un hombre que se opone a todo, que se enfrenta a todo, que resiste todo: un hombre ocioso. Ni tan siquiera tiene nombre. “C.” es como Yusuf Atilgan lo llama, así, escuetamente.
C. no aguanta lo ordinario, lo monótono, las comodidades de la rutina, es superior a sus fuerzas. Hombre extraño y ansioso, desilusionado del amor, deambula. Por las calles de Estambul decidido a no sucumbir a las expectativas de la familia y la sociedad.
Publicada en 1959 y a menudo comparada con El extranjero de Albert Camus, Un hombre ocioso desafió los valores de la joven República de Turquía poniendo de manifiesto el sentido de la alienación del hombre moderno.